Cuando la gente va al médico, espera mejorar en lugar de empeorar. Por desgracia, esto no siempre sucede así. Justia ofrece un Centro de Derecho de Negligencia Médica para ayudar a informar a los pacientes sobre sus opciones legales.
Según un famoso estudio (en inglés) de la Universidad Johns Hopkins, la negligencia médica era la tercera causa de muerte en los Estados Unidos en 2016, por detrás de las enfermedades cardiacas y el cáncer. Aunque no se puede cuantificar el número exacto de muertes, las investigaciones sugieren que la negligencia de médicos y profesionales sanitarios cobra cientos de miles de vidas cada año.
En algunos casos extremos, la mala praxis va más allá del simple descuido. Este mes hace doce años, el exmédico de Michael Jackson fue condenado por homicidio involuntario en relación con la muerte del “Rey del Pop”. Jackson había muerto repentinamente con sólo 50 años, poco después de que el Dr. Conrad Murray se convirtiera en su médico personal. Murray había tratado el insomnio del cantante suministrándole propofol, un potente fármaco utilizado a menudo como anestésico en los hospitales. Después de que una investigación revelara que Jackson murió por intoxicación aguda de propofol, los fiscales argumentaron (en inglés) que Murray dejó desatendido a su célebre paciente tras suministrarle una gran dosis del fármaco. El médico caído en desgracia pasó cerca de dos años en prisión.
Aunque la negligencia médica generalmente no da lugar a cargos penales, puede dar lugar a una demanda contra un proveedor de atención médica. El Centro Justia de Derecho de Negligencia Médica (en inglés) de las Guías Legales de Justia describe muchas de las formas que puede adoptar la negligencia. También analiza lo que los pacientes necesitan probar para establecer la responsabilidad de un médico u otro profesional de la medicina. Estos casos suelen ser más complejos que los casos ordinarios de lesiones personales. Por ejemplo, una víctima o su familia pueden necesitar contratar a un testigo experto o presentar documentos adicionales con su demanda.
Cómo Ocurre la Negligencia
Algunos tipos de mala praxis (en inglés) pueden producirse durante el proceso de diagnóstico (en inglés), como cuando un médico diagnostica a un paciente una enfermedad equivocada. El paciente puede entonces recibir un tratamiento equivocado que podría empeorar su estado. O un médico puede no diagnosticar una enfermedad tan pronto como debería. Esto puede hacer que el paciente no reciba tratamiento a medida que se desarrolla su enfermedad, lo que puede empeorar su pronóstico.
Nadie desea pasar por el quirófano, en parte porque los errores quirúrgicos (en inglés) siguen siendo un riesgo bien conocido. Estos errores pueden consistir en operar una parte del cuerpo equivocada, dejar un instrumento quirúrgico dentro del cuerpo del paciente o cometer un error al administrar la anestesia. En otras situaciones, la mala praxis puede producirse cuando un médico no comprueba el historial médico de un paciente antes de una intervención o no realiza un seguimiento adecuado después de una intervención para tratar cualquier complicación que pueda surgir.
Los médicos también pueden ser considerados responsables de errores de medicación (en inglés), como cuando prescriben a un paciente un fármaco o una dosis equivocados. O puede surgir una demanda por negligencia profesional cuando un médico no advierte debidamente a un paciente sobre un medicamento, o cuando no tiene en cuenta una alergia documentada. A veces, sin embargo, un error de medicación implica un error de un farmacéutico al rellenar o dispensar la medicación, y también puede ser considerado responsable.
Probar una Demanda por Negligencia
No todos los errores justifican una demanda por negligencia. La ley no exige perfección a los profesionales sanitarios, sino sólo competencia. En otras palabras, un médico tiene que hacer lo que haría un médico competente en su campo al tratar a un paciente similar. Para obtener una indemnización, el paciente o la familia que interponga una demanda por negligencia médica debe demostrar la norma de asistencia aplicable a la situación, demostrar que el médico no cumplió esa norma y explicar cómo el error causó las lesiones.
En algunos casos extremos, como cuando un cirujano opera una parte del cuerpo equivocada, cualquiera puede saber que el médico no cumplió la norma de atención adecuada. Sin embargo, lo más frecuente es que un juez o un jurado no tengan los conocimientos médicos necesarios para decidir si un profesional médico es responsable. El demandante tendrá que contratar a un perito cualificado (en inglés) que le ayude a probar los elementos de su demanda. Además, algunos estados (aunque no todos) exigen que el demandante presente una declaración jurada de méritos (en inglés) al presentar la demanda o poco después. Este documento suele afirmar que un experto ha revisado el caso y cree que hubo mala praxis. Si no se presenta una declaración jurada de los méritos como se exige, el caso puede ser desestimado.
Un demandado por negligencia médica también puede conseguir que se desestime un caso si el demandante no presentó la demanda dentro del plazo de prescripción aplicable. Esto define el periodo de tiempo para presentar una demanda. A veces, los casos de negligencia médica prescriben antes (en inglés) que los casos ordinarios de lesiones personales. Además, dado que el daño puede no ser inmediatamente obvio, puede entrar en vigor una disposición denominada “regla de descubrimiento”. Esta suele establecer que el plazo para interponer una demanda no empieza a correr hasta que el paciente descubre el daño, o debería razonablemente descubrirlo. También pueden aplicarse plazos distintos a los niños lesionados por negligencia médica.
Estudio en 50 Estados Sobre Demandas por Negligencia Médica
Las leyes sobre negligencia médica y las normas procesales varían considerablemente de un estado a otro. Por lo tanto, Justia ha compilado un estudio de 50 estados (en inglés) para ayudar a los pacientes en cada estado. El estudio trata temas tales como los elementos de una demanda, declaraciones juradas de mérito, y los estatutos de limitaciones y la regla de descubrimiento. También incluye enlaces a las leyes y jurisprudencia correspondientes que Justia proporciona gratuitamente. Esto permite a los posibles demandantes y a otras personas investigar la ley más a fondo.
Además, el estudio de 50 estados sobre demandas por negligencia médica analiza los límites de indemnización por daños y perjuicios, que algunos estados han impuesto en estos casos como parte de la reforma de la responsabilidad civil. Estos límites pueden limitar el importe total de los daños (en inglés) que un demandante puede recuperar, pero a menudo sólo se aplican a los daños no económicos, como el dolor y el sufrimiento (en inglés) y la angustia emocional. Algunos límites pueden contener matices o excepciones complicadas. El estudio pretende reflejarlos en la medida de lo posible.
Reflexiones Finales
Los pacientes tienen derecho a esperar de sus profesionales médicos un trato competente. Sin embargo, como demuestran diversos estudios, esto no ocurre con tanta regularidad como se esperaría. Quien piense que puede haber sufrido un incidente de negligencia médica, o sospeche que ha perdido a un ser querido por un error evitable, debe consultar a un abogado especializado en negligencias médicas (en inglés) sobre su situación concreta. Mientras tanto, el Centro Justia de Derecho de Negligencia Médica proporciona un panorama general de estas reclamaciones y los principales problemas a los que pueden enfrentarse los pacientes. Al igual que las demás Guías Legales de Justia (en inglés), su objetivo es que la ley sea transparente y accesible para todos.
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